Siguiendo con una prolífica racha de modelos BMW nos presenta como anticipo a su debut con motivo del Salón de Ginebra al nuevo BMW Serie 2 Active Tourer adentrándose, tal y como nos llevaba adelantando con los últimos modelos conceptuales, en el segmento de los monovolúmenes de dimensiones compactas, pero desde la perspectiva “premium”, listo para enfrentarse al Mercedes Clase B.
BMW acude a la tracción delantera. Acude, por necesidad del segmento, apuntan desde la marca, rompiendo así la hegemonía de la propulsión, convertida ya en más en una seña de identidad que una forma de hacer mover a sus coches. Nuevas mecánicas de 3 y 4 cilindros, dimensiones contenidas en su exterior sin renunciar a la habitabilidad interior y el cuidado propio del segmento premium para un modelo que se las tendrá que ver con no pocos seguidores de la marca, seguidores de la deportividad implícita en el ADN de BMW.
Nace el BMW Serie 2 Active Tourer. Nace el monovolumen de BMW.
Su diseño: una longitud cercana a la del Serie 1, pero más ancho y alto
Llamado inicialmente BMW Serie 1 GT y presentado ya en el Salón de París de 2012 como BMW Concept Active Tourer, asociado entonces a una mecánica híbrida, se nos presenta hoy un nuevo hito histórico en la marca alemana que fiel a los modelos conceptuales que nos han acompañado durante los últimos salones traslada a una silueta de techo elevado y pronunciadas caídas, tanto en el capó delantero como en su recta zaga, los actuales rasgos de diseño de la marca.
Acompañando a la característica parrilla nos encontramos con dos grandes ópticas, no faltando en este frontal una buena dosis de nervios y curvas por su capó paragolpes, tal y como queda también bien presente en su lateral definido por dos marcadas hendiduras. En su zaga, se repite la fórmula de las grandes ópticas.
En cifras, el BMW Serie 2 Active Tourer cuenta con una longitud de 4.342 mm, una anchura de 1.800 mm y una altura de 1.555 mm, contando con una distancia entre ejes de 2.670 mm. Por peso, en función de la mecánica, oscila entre los 1.320 y los 1.505 kg, contando con un maletero de 468 litros ampliable hasta los 1.510 litros con asientos trasero abatibles en una relación de 40:20:40. Reforzando ese lado práctico no falta la apertura y cierre automático del portón, el cual se puede accionar además con un movimiento de pie desde la parte posterior.
Para contextualizar el modelo nos encontramos con que cuenta con una longitud similar al BMW Serie 1, siendo más ancho y considerablemente más alto. Respecto al Mercedes Clase B cuenta con una longitud ligeramente menor, siendo más ancho y con una altura próxima.
Sus mecánicas: tres y cuatro cilindros turbo de nueva factura
En su lanzamiento, la gama del BMW Serie 2 Active Tourer parte con el BMW 218i de 3 cilindros y 1.5 litros con una potencia de 136 caballos con un par de 220 Nm a 1.250 rpm, registrando una aceleración en el 0 a 100 km/h de 9.3 segundos y una velocidad máxima de 200 km/h, con un consumo medio de 4.9 l/100 km, marcando unas emisiones de CO2 de 115 g/km.
Como punto medio la alternativa diésel, con el BMW 218d que con un bloque de 4 cilindros y 2 litros entrega una potencia de 150 caballos a 4.000 rpm con un par de 330 Nm entre 1.750 y 2.250 rpm. Prestacionalmente registra un 0 a 100 km/ en 8.9 segundos y una velocidad máxima de 205 km/h, con un consumo medio de 4.1 l/100 km que lo sitúan con unas emisiones de CO2 de 109 g/km.
Como techo actual de la gama el BMW 225i que con una mecánica gasolina de 4 cilindros y 2 litros registra una potencia de 231 caballos con un par de 350 Nm a 1.250 rpm. Con esta mecánica el BMW Serie 2 Active Tourer marca un 0 a 100 km/h en 6.8 segundos con una velocidad máxima de 235 km/h, con un consumo medio de 6 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 139 g/km.
Para su transmisión se recurre a una nueva caja de cambios manual de 6 velocidades, mientras que la alternativa de 3 cilindros puede recurrir a un cambio automático de 6 velocidades y las alternativas de 4 cilindros a una nueva caja de cambios Steptronic de 8 velocidades.
Con una configuración TwinPower Turbo, recurriendo a la inyección directa, no faltan medidas como la recuperación de la energía del frenado, el Start Stop, el indicador del cambio óptimo de marchas, el modo ECO PRO o neumáticos de baja resistencia a la rodadura.
Estos motores tienen una estructura modular en cilindros de 500 cc, quedando desarrollado en aluminio. Son las mismas mecánicas que nos encontramos en la nueva generación de Mini.
Tecnología a bordo
Entre la dotación de elementos de asistencia a la conducción y seguridad nos encontramos con el asistente de conducción en retenciones, denominado por la marca como Traffic Kam Assist y que, pudiéndose activar entre 0 y 40 km/h, regula la velocidad respecto al coche que nos precede, detectando además de las líneas de los carriles, encargándose la dirección de mantener el vehículo dentro del carril.
Cuenta con pantalla Head-Up Display y a través del Speed Limit Info se informa al conducto de límites de velocidad o tramos donde no se puede adelantar. No falta tampoco la alerta por cambio involuntario de carril o el asistente de luz de carretera, activándose de manera automática en función de las circustancias las luces de largas o de cruce, detectándose coches que se aproximen en sentido contrario a una distancia de 1.000 metros y las luces posteriores de coches que circulan por el mismo carril a una distancia de 500 metros.
Completa el conjunto de asistencias la ayuda al aparcamiento, el aviso de colisión con el coche que circula delante y la advertencia de presencia de peatones con función de frenada de emergencia.
En el apartado de conectividad nos encontramos con el BMW ConnectedDrive permitiendo así contar con servicios de navegación (como la información del tráfico real), información y entretenimiento ligados a la idea del smartphone, además cuenta con sistema de llamada de emergencia así como contacto con el centro de llamadas de BMW durante las 24 horas del día.
Entradas
